El Gobierno británico lanzó un plan integral para prohibir el uso de teléfonos móviles en las escuelas durante el horario escolar. El objetivo es minimizar distracciones y mejorar el comportamiento en las aulas.
Preocupa el impacto negativo del uso de teléfonos móviles en el rendimiento educativo debido a los problemas de acoso, distracción e interrupción en el aula.
Palabra de la UNESCO
Un informe de UNESCO advirtió sobre una relación negativa entre el uso excesivo de la tecnología digital y el rendimiento de los estudiantes.
UNESCO sugiere prohibir los celulares en las aulas.
El informe muestra que algunas tecnologías pueden servir de apoyo al aprendizaje en algunos contextos, pero NO cuando se utilizan en exceso o de forma inadecuada.
No son pocos los países que implementan medidas para prohibir dispositivos móviles en las aulas.
Entre otros podemos citar: En Francia e Irlanda hace ya más de 5 años que tienen contempladas medidas “anticelulares”. Italia, Suecia y Finlandia con diferentes regulaciones también han implementado diferentes medidas.
Países Bajos adopta para este 2024 la prohibición del uso del celular para todos los alumnos de secundaria y en España están tomando medidas firmes contra el uso de teléfono móvil en el aula.
Beneficios y desafíos de prohibir celulares en las aulas.
La prohibición del uso de celulares en las escuelas trae tanto ventajas como desafíos. Por un lado, se espera que reduzca distracciones para fomentar más atención e interacción entre docentes y alumnos.
Según un estudio citado en el informe de la UNESCO, la retirada de los teléfonos inteligentes de las escuelas en Bélgica, España y el Reino Unido mejoró los resultados del aprendizaje, especialmente en el caso de los estudiantes que no estaban rindiendo tan bien como sus compañeros.
Por otra parte, intentar una prohibición total es una tarea que plantea varios desafíos. Uno de los más grandes es la dependencia con los dispositivos.
“Los estudiantes necesitan aprender los riesgos y las oportunidades que conlleva la tecnología, desarrollar habilidades críticas y entender cómo vivir con y sin la tecnología”, declaró la Unesco. “Alejar a los estudiantes de tecnología innovadora puede ponerlos en desventaja”.