Fue uno de los mejores pilotos de la máxima competencia del automovilismo mundial: ganó 25 carreras y se consagró en 1975, 1977 y 1984. Y supo reponerse con un temple inigualable a un terrible accidente en 1976, del cul salio milagrosamente vivo
Un coche en llamas y una cicatriz eterna: así fue el famoso accidente de Niki Lauda en el GP de Alemania.
Video Gentileza Revista Corsa.
A los 70 años, murió Niki Lauda, uno de los mejores pilotos de la historia de la Fórmula 1. Se impuso en 25 carreras y ganó tres títulos del mundo. Sin embargo, la mayoría de la gente lo recuerda por su peor momento. Por el terrible accidente que sufrió en Nürburgring en 1976. Lauda fue un enorme piloto en una época en que sobresalir no era tan sencillo. Tenía un talento poco vistoso. Lo suyo no eran las grandes maniobras, ni los sobrepasos alocados. Era un ingeniero puesto tras un volante. Su mayor virtud era la inteligencia, la sangre fría. El campeón sobrio. Lograba pensar con tranquilidad a trescientos kilómetros por hora.
Fuente: Infobae